martes, 4 de enero de 2011

Una fecha para felicitar a dos

Un dia, dos celebraciones.

Hace cuatro anos que lleve a mi esposa al hospital a parir.  Y aunque era la segunda ocasion la emocion no fue menos que la experimentada durante  la primera , ni tampoco los temores. Siempre hay espacios en nuestros pensamientos para las dudas, aunque los doctores nos reafirmen una y otro vez que todo marcha como se espera.
Saldra todo bien? Nacera sano nuestro nino?  Es en esos momentos que nuestra espiritualidad aflora, y aunque calladitos, y casi que disimulando frente a los demas pedimos a Dios, cualquiera que sea nuestra imagen de El que todo llegue a feliz termino. Que obvie y olvide aquellos pecaditos que hemos cometidos y que si de alguna forma lo hemos insultado que nos los cobre si, pero a nosotros quienes pecamos.  Pedimos entonces que los medicos sepan que hacer ante algun imprevisto. En fin, juramos que seremos excelentes seres humanos ,padres, esposos, que adorararemos a nuestro projimo aunque el no a nosotros…… ofrecemos cielo y tierra, como si algo de eso realmente nos perteneciera, para que la criatura que esperamos este pronto con nosotros sano y salvo.   
Seguramente, cuando ya todo ha pasado y el bebe este fuera de peligro, no cumplamos ni un minimo de tales promesas, obviamente hasta que la circunstancias nos hagan una encerrona volvemos a ese estado cuasi-espiritual que nos impulsa hacia lo divino. Dudo que halla muchas excepciones, y no soy una de esas. Y hasta los que se denominan ateos, estoy seguro, que flaquean hasta poner en duda sus propias convicciones. Asi somos, asi hemos sido. La simple y acomodada naturaleza humana.
Hoy quiero renovar esas promesas y no esperar a que la adversidad me arrincone y convenientemente por desesperacion caer en ese absurdo circulo vicioso. Y aunque no soy ateo, tampoco pienso molestar a la divinidad. Quiero simplemente procurar llevar a cabo ese proyecto de vida que son mis hijos. Espero hacerlo de la mejor manera posible. Consciente de que habran altas que seguramente vendran acompanadas de muchas bajas. Que mis esfuerzos y los de mi esposa pareceran carentes de sentido al no lograr nuestros objetivos para con ellos.  No es facil armar un rompecabezas sin la imagen de guia.  Y con ellos el manual de instrucciones debio perderse en alguna parte. Pero de otra manera, donde estaria el reto?. Cual seria la gracia?
Ser padres, cuando se toma en serio, es una tarea titanica. Eso no es un secreto. Es un viaje a travez de nuestro ser, donde nos reinventamos, nos descubrimos, y aunque ellos son el sujeto de la crianza terminamos nosotros tambien creciendo.
Es mi esposa quien ha tenido que lidiar con ellos la mayor parte del tiempo. Y por eso no solo celebro los cuatro anos de existencia de nuestro pequeno sino tambien la dedicacion y sacrificios de ella desde el mismisimo dia uno.
Felicidades a ambos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario